En el 1Q 2012, la economía mexicana creció 1.31% con relación al cuarto trimestre de 2011 (en cifras desestacionalizadas). En términos anuales (respecto al 1Q 2011), que es un comparativo más común, el crecimiento fue de 4.6%, una tasa que destaca en medio de un ambiente internacional dominado por la recesión en Europa. Además, la cifra es superior a las previsiones de los especialistas del sector privado (encuesta de Banxico), que en los meses recientes esperaban una tasa alrededor de 3.7% para este periodo. Con este resultado, seguramente deben mejorara las expectativas para este año.
Los servicios, que constituyen 60% del PIB total, crecieron 5.0% anual, destacando en su interior –por su importancia- sectores como el comercio (6.7%), los transportes (5.4%), mientras que los servicios financieros retomaron una buena dinámica, con 13.0% anual. El ritmo de los servicios es vital para una economía por su relación con el desempeño del mercado interno, mismo que está asociado a la estabilidad de los precios y de las tasas de interés, la generación de empleos, la dinámica del crédito, entre otros. Hoy, el mercado interno está retomando su papel de driver de la economía.
Por su parte, el sector industrial –constituye 35% del PIB total- creció 4.5% anual en el 1Q 2012, favorecido las manufacturas, que crecieron 5.5% (representa 50% del sector industrial) y la construcción con 4.9% de avance (constituye 19% del PIB industrial). Dentro de las manufacturas destaca en particular el crecimiento de la industria automotriz (14.9%), derivado del buen ritmo en la producción y exportación de vehículos y autopartes.
La construcción, un sector importante por sus efectos multiplicadores sobre el resto de la economía, creció 4.9% anual y ha sostenido tasas superiores a la media nacional en los últimos seis trimestres. Todo lo que genera este sector representa una parte importante de la inversión física del país, por lo cual, en la medida que la construcción mantenga su dinamismo, la economía mantendrá un buen potencial de crecimiento futuro. La inversión es el principal factor del crecimiento económico y la generación de empleos, además de que induce una mayor colocación de crédito. En efecto, el crédito a las empresas creció 8.0% real anual en el 1Q 2012, casi el doble que el PIB.
Para este año, el PIB podría crecer cerca de 4.0%, casi el doble que su tendencia histórica (2.2% promedio anual en la última década), esperándose un promedio cercano a 3.5% a mediano plazo. La dinámica de México está condicionada a la de Estados Unidos, que crecería alrededor de 2.5% a mediano plazo.



